Sábado 18

Ayer a estas horas estaba sentada en la sala de espera del dentista... y estaba de los nervios.

La cita era a las 17:30, y cóntra todo pronóstico de la gente que me conoce, allí estaba yo, puntual como yo sola. Lo malo es que el dentista llevaba un poco de retraso, en contreto mi retraso fue de 1 hora y 30 minutos por culpa de una EXTRACCIÓN (anda como lo mío...¬¬) , y en ese tiempo pues me pasó de todo...

Mi madre me intentaba dar conversación para tranquilizarme y era como hablar con la pared, yo la decía si y no con la cabeza sin saber muy bien que era lo que me estaba preguntando, mientras, lógicamente llegaron más pacientes, casi todos ellos iban tranquilos, iban a una simple limpieza de boca, y la espera se les hizo muy amena viendo como yo cada vez estaba peor y llegando a un punto en el que no sabía ni lo que hacía. A eso de las 19:00, una mujer me llamó y me dijo que ya podía pasar...

Y allí estaba yo, tumbada en la sillita esa, analizando todo lo que por allí había he intentando tranquilizarme conté los cuadrados esos que sulen porner en el techo... pero terminé pronto sólo había 16... Al ratito llegó el dentista y me dijo que lo sentía por el retraso, yo le dije que no pasaba nada, que si tenía lio pues que me iba a mi casa sin problema, pero no coló...

Ya me empezó a poner la anestesia, acto segudo yo ya estaba blanca como la pared y mareada (si, así soy yo de valiente!), y no es por justificarme pero el hombrecito me puso cuatro jiringuillazos en anestesia... Luego se fue a dar un paseo para que me fuera haciendo efecto, y vino una mujer a abanicarme por eso de que me había mareado y tal, y mientras iba notando la desagradable sensación de tener media boca dormida.

Al cabo de un rato volvió, y como comprobó que ya estaba mejor empezó la cosa... la verdad es que no me enteré de mucho, pero cuando tiraba para sacar la muela era muy dasagradable... Finalmente la quitó me dió unos cuantos puntos, fue a poner otra vez derecho el sillón ese y me volví a marear (si!!), así que nada, estuve allí un rato a ver si se me pasaba mientras el hombre me contaba lo que podía y no podía hacer.

Y este es el relato de mi agradable tarde en el dentista... Las consecuencias, en mi opinión, ahora mismo son peores, a penas he podido dormir porque me sbía la boca a sangre, me tiran los puntos y no puedo hablar mucho, y lo de comer cosas sólidas pues ahora mismo no es que sea una cosa que esté a mi alcancé... Eso si, me tomo mucho medicamento, estoy medio dorgada de todo lo que me tomo, y en cuanto que se empieza a pasar el efecto del ibuprofeno...

En fin...