Lo que tenga que ser, será

Lo único que hacía últimamente era pensar, intentaba llegar a alguna conclusión pero se dió cuenta de que era incapaz.

Por ello decidió caminar, caminar sin ningún rumbo concreto, caminar a ninguna parte. Aprendió a observar todo lo que tenía a su alrededor, comprendió que cada persona era un mundo, cada persona tenía una historia diferente que contar. Y ella no conocía muchas historia, últimamente se había limitado a vivir la suya. Cada persona que conocía era un nuevo personaje de esa historia, los había de todo tipo: buenos, malos, felices, trsites. Había personajes con lo que no había cruzado ni dos palabras, pero ya estaban ahí, en su historia.

Y siguió caminando, decidió perderse. Lo necesitaba. Pero pronto se dió cuenta de que había que bajar a la realidad, había que dejar de vivir en un mundo que se había creado que ni si quiera era cierto. La realidad es diferente, siempre lo es.

1 Soñadores:

Luis dijo...

Me identifico tanto con ese texto...

Gracias por escribirlo, me ha hecho reflexionar.